Director: Paul Naschy
Actores :Paul Naschy, Antonio Mayans, María Jesús Solina, Saturnino García, Paco Racionero
Duración: 96 min
Género: Terror
País: España
Año: 2010
Cuando me enteré del rodaje de una nueva película de Paul Naschy, pensé en el tiempo en que este actor fue más reconocido fuera de nuestras fronteras que dentro, que sus películas fueron vilipendiadas por gran parte del público español, hasta que surgió un nutrido grupo de seguidores que, al fin, hicieron justicia al gran Jacinto Molina. Pensé que, Jacinto, haría una película muy en su estilo y que la opinión de muchos espectadores no sería agradable.
Pasó el tiempo y Empusa no salía. Problemas por todos lados, incluida la desaparición de nuestro querido Paul Naschy, hicieron que fuese tachada de película maldita.
Antes de verla, leí varios comentarios sobre ella y todos sin excepción la ponían "de grana y oro", pero me prometí no dejarme llevar y verla con la mente muy pero que muy abierta. Con las defensas totalmente bajadas, contando con que soy un fiel seguidor de Paul desde niño... Se lo debía... por tantos y tantos buenos ratos que pasé con sus pelis. Logré dar con el film y visionarlo y... vaya tela marinera.
El guión es planito, el montaje un tanto enredado, la musiquilla machacona que no para ni un instante y no te deja casi escuchar lo que dicen los personajes, el ambiente es de cuatro amiguetes rodando un fin de semana una peli y que el sol salga por Antequera...
Pues a pesar de todo eso, señores, he de decir que me ha gustado... un me ha gustado con matices, por supuesto y porque, quizá, yo he querido desde un principio que me gustase, incluso antes de verla, por lo que Paul Naschy representa para mí, desde mi infancia, desde que vi, recuerdo perfectamente, una película suya por primera vez: La noche de Walpurguis, que hizo que no pegara ojo y tantas y tantas, hechas con más corazón que medios. Me ha gustado porque es su última película, porque, desgraciadamente, ya no está entre nosotros y porque tuvo, permitidme la expresión, los cojones de hacer cine fantástico y de terror en un país y una época en que no se supo apreciar.
No quiero engañar a nadie, Empusa tirará para atrás a más de uno, pero a esa legión de incondicionales, entre los que presumo de encontrarme, les agradará.
Me ha gustado ver a Paul, sus monólogos, explicando, casi como si de un audio comentario para ciegos se tratase, todos y cada uno de los pasos que va dando, con humor amable, me han gustado los guiños a todo lo que el fantaterror representa, las alusiones continuas al Drácula de Stoker, la pinta de Naschy al final del film, de caza vampiros trasnochado (en la película interpreta a un actor de cine de terror retirado y olvidado), el mar de Alicante y una tranquilidad y lentitud en el desarrollo que, al contrario de lo que suele pasar, me ha gustado, porque era como si pudiera disfrutar de la presencia de Naschy un poco más, como digo, sabiendo que jamás volveremos ya a verlo en un nuevo trabajo, agradecí su pastoso avance, en otra situación hubiera hecho que pasara de la película, por supuesto, y su pinta de film amateur.
La escena del cementerio con esos tres vampiros ridículos encabezados por Saturnino García, hizo que me riera de verdad, por su simpleza y buena intención.
El argumento es simple: Un par de abueletes, más cercanos ya de visitar un geriátrico que otra cosa, encuentran un brazo amputado en la playa. Lejos de hacer lo que cualquier persona normal haría que sería avisar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, deciden callarse y llevárselo a su casa para investigar. Aparecen más cadáveres en la playa y la investigación de nuestro querido protagonista avanza hasta dar con el origen y causa de todo: Las Empusas, una mezcla de vampira y sirena, ancestral, con la incursión de la que se conoce como la primera vampira del mundo; Lilith, cuya historia, dicho sea de paso, es fascinante.
Hay un momento de claro homenaje a una película mítica de Jonh Landis, Un hombre lobo americano en Londres (1981), que quien la haya visto, sabrá reconocer al instante.
Paul se mueve poco en el film, casi siempre está sentado, murió casi al mes de acabar la película, apenas camina y salvo un par de escenas en las que el fiero león que fue aún es capaz de rugir, todo transcurre de forma sosegada y serena, hasta el final. Se pueden apreciar sus tremendos brazos, legado de su época deportista, pese a su edad y enfermedad, su mirada firme, sus gestos, su estilo...
La película no engaña a nadie desde el cartel promocional, setentero total, y contiene escenas lésbicas propias del cine de aquella época, ¡AH! se me olvidaba... y tías buenas a punta pala con más de un destape.
En fin... que por encima de todo es una peli de Paul Naschy y que a mi con eso me sobra.
Para terminar, como colofón y rendir mi modesto, pequeño y sincero homenaje a uno de mis actores, preferidos, diré que la película se estrenó cuatro años después de su muerte...tal vez, dejando volar mi imaginación de seguidor incondicional, una señal de Paul Naschy desde el otro lado, un guiño desde la barca de Caronte con el que nos demuestra que nos puede hacer un regalo desde el más allá, que aunque él no se encuentre en el mundo de los vivos, aún puede verse una película suya en estreno, porque un monstruo del fantaterror como él, es capaz de engañar a la muerte para que lo podamos ver en pantalla...aunque puede que la propia muerte, haya querido tener con él una deferencia y dejarle volver a esa pantalla en la que ya siempre será inmortal... Sé que suena a gilipollez de las gordas, lo sé, pero...qué coño...fue el hombre lobo definitivo de mi infancia...
Gracias Paul...Gracias Jacinto...
"Ya me encargare yo de echar un bailecito con Satanás..."